El sorprendente mundo de Sandro...

El sorprendente mundo de Sandro...

18 de septiembre de 2011

Entrevistas y notas

 
EN ARGENTINA NO LE HAN DEJADO FILMAR UNA PELICULA SOBRE LA ÉPOCA DEL ROCK


¡Estás mucho más delgado! Fue nuestra primera impresión dirigida a Sandro en esta, su sexta visita a la capital mexicana.

-El año pasado algunos periódicos mencionaron que venías "pasado de kilos".
-Tú sabes el trabajo, la presión del tiempo, correr de un lugar a otro... no, ninguna dieta.

Nos encontrábamos en la suite del hotel donde se presentaba esa noche. Varias salas, un bar, la vista de México y Sandro tocando el piano. Parecía un fondo musical a nuestra plática. Sandro ha cumplido 17 años como cantante. Tenía entonces 13.
-Nunca tuve dudas de lo que deseaba ser: cantante. Por ello, nunca sentí frustraciones ni cambios en mi manera de pensar o ver las cosas. El hombre y el artista crecieron juntos, fue una metamorfosis paralela. Dejé los estudios para trabajar y sostenerme. Vendí vinos, fui camionero, joyero, modelo de una casa de ropa para hombre y estuve en talleres metalúrgicos. Hasta los 17 años pude mantenerme con lo que ganaba cantando”. La primera vez que me paré en un escenario fue como un enervante... lo probé y ya no pude dejarlo. Mi primer contrato en serio tuvo que firmarlo mi padre, pues yo era menor de edad.
Sandro, “El Gitano", no conoció la fama de la noche a la mañana. Para ocupar el sitio actual tuvo que pasar varios obstáculos:
-La crítica, la censura, las opiniones de algunas personas, en especial aquellas que realmente afectan y pueden "darte duro" porque pudieron influir dentro de la mayoría de la gente .Las criticas las tomo de quien vienen, como algo positivo si son bien intencionadas y constructivas, pero la que me importa es la opinión del público alrededor del escenario.
En Argentina la censura es muy rígida. Tienes que limitarte, principalmente en los desarrollos cinematográficos. 
Sandro citó un ejemplo:
-Las películas tienen que ser aptas para todo tipo de público. No puedes mencionar la palabra “amante”, -aunque no existan las escenas fuertes- a menos que sea para adultos. Tampoco se pueden tratar temas históricos o crítica social.
Yo he intentado dirigir un filme sobre la “explosión de costumbres en 1955”. En esa época hubo fuertes cambios en la ideología de la gente, en la moda. Se vinieron abajo los prejuicios y empezaron los rebeldes. Viví plena y conscientemente esa época a pesar de mi juventud; yo estaba más desarrollado y me comportaba como un joven mayor.

Sandro nunca se siente solo ni triste
-Claro que todos tenemos momentos, pero nunca una depresión fuerte. Siempre lleno esos huecos”. No he pensado en casarme porque actualmente me siento feliz así, algún día lo haré, eso es definitivo, pero será cuando me sienta totalmente estable, si lo hiciera ahora no tendría libertad auténtica. Sería difícil mantener una relación como pareja. Me casaré cuando no sienta los impulsos de lanzarme de un lugar a otro, cuando piense en dedicarme de lleno al cine, a la grabación de discos y una que otra presentación. No podría hacerlo ahora que viajo todo el año. Tendría el pendiente de una familia y la educación de mis hijos y eso limitaría mi trabajo. Creo que sería egoísta de mi parte querer arrastrar a una mujer a una forma de vida que no es la normal para ella, a la que no está acostumbrada.
Todas mis inquietudes están enfocadas hacia los espectáculos y todas mis energías las canalizo en esto. Es lo que me apasiona. Si no fuera cantante seria músico, director de cine, iluminador, cualquier cosa que tuviera relación con lo que me gusta y me llena. 


Colaboración: Pili, una nena más. México